Porqué me encanta trabajar con niños y niñas en el espectro del autismo, en 20 datos maravillosos.
Esta va a ser una entrada con muy poca ciencia, pero con mucha sensibilidad.
- Los niños y niñas en el espectro del autismo tienen una mirada especial que les caracteriza. Un brillo diferente donde se aprecia la curiosa forma que tienen de escrutar la realidad.
- Su forma de percibir los estímulos (en ocasiones) es realmente fascinante y envidiable. Sabes que ese procesamiento produce sensaciones que no todas las personas pueden llegar a conocer, ni a imaginar.
- Muchos de ellos desarrollan una intensidad emocional que se escapa a la comprensión social normativa. Pero quien llega a ser capaz de comprenderla y empatizar con sus sentimientos, se puede llegar a sentir totalmente invadido de emoción.
- Te enseñan que existen otras formas totalmente válidas de comunicarse mientras te llevan a buscar otra forma de atención conjunta mucho más intensa y significa
tiva.
- Cuando se interesan por algo su atención se focaliza en ello de manera totalmente fuera de lo común. Resulta impresionante la forma en que guían su motivación intrínseca. Algunos llegan a dominar conceptos, ideas, habilidades y procesos de manera abrumadora.
- Son niños y niñas con pensamientos sencillos y básicos, más de lo que creemos. La complejidad que les atribuimos viene dada por la cantidad de convenciones y normas sociales que nos empeñamos en inculcar. Y así sólo olvidamos que esa simplicidad es la que a veces más felices nos hace.
- Esa intensidad desbordante que caracteriza al autismo nos hace sentirnos realmente vivos.
- Se salen de lo neurotípico, de lo normativo, de lo convencional, de lo «llámalo como quieras». Y eso, mola. Es muy enriquecedor.
- Algunos y algunas tienen habilidades musicales asombrosas. A veces esa es su única forma de comunicación, resultando un fenómeno de gran peso emotivo.
- No viven desconectados, solo es que su forma de relacionarse es distinta. Y cuando la comunicación aparece en cualquiera de sus formas, el encuentro entre ambas personas tiene mayor calado.
- Valoran los más pequeños e insignificantes detalles, y eso es de agradecer.
- Si entablas una buena relación con ellos y ellas puedes esperar que sean los amigos más fieles de este mundo.
- Pueden llegar a ser unos exploradores de sensaciones que te lleven a descubrir mundos nuevos a través del juego.
- Si el juego es bueno, les fascinará pasarse horas a tu lado.
- Por lo general puedes esperar total sinceridad y sin una intención maliciosa detrás.
- Como suelen mantenerse al margen de convenciones sociales sabes que te relacionas cara a cara con una personalidad totalmente pura y transparente.
- Si sabes cómo procesan la realidad entenderás que durante una conversación, aunque no te miran a los ojos, en su interior están manejando una cantidad de información sobre ti que no serías capaz de imaginar.
- Gastan una enorme cantidad de energía manejando variables que influyan en la otra persona con tal de mostrarle una actitud empática.
- El desgaste cognitivo durante sus relaciones sociales es enorme. Necesitan manejar mucha información en muy poco tiempo y con una espera de respuesta por nuestra parte demasiado corta para el procesamiento lento del lenguaje que muchos de ellos tienen. Por eso valoro mucho cada momento con ellos.
- Siempre están dispuestos a mostrarte la forma en que sienten y perciben los estímulos, y como esto les ayuda a crear su propia imagen de la realidad.